viernes, 10 de febrero de 2012

Retomando viejos sueños

Como cuando no sabes qué camino coger y de repente algo ajeno a todo te hace tomar una decisión. Como cuando no sabes si ir al cine o a cenar, y un pequeño factor te inclina a elegir uno de los dos sabiendo que es el más adecuado. Como cuando no sabes si quedar con tu novia o con tus amigos, porque cada uno te aporta cosas distintas, y de repente, como un pequeño soplo de viento, algo te empuja a llevar a cabo uno de lo dos planes, a sabiendas de que no te equivocas.

Por todo esto ha nacido este blog. Metáforas al margen, diré que hace una semana no tenía ni idea sobre el destino de mi vida -estudiantil y profesionalmente hablando-. Con diecisiete años que tengo y la selectividad a la vuelta de la esquina, aún no tenía decidido qué estudiar en la universidad. Mi sueño desde los doce años aproximadamente, el de ser periodista deportivo, se había ido truncando con el paso de los años por las voces exteriores que me decían, me dicen y me seguirán diciendo, que es una profesión sin salidas y en la que hay miles de personas para muy pocos puestos de trabajo. Pero... en los tiempos que corren, ¿en dónde sobran puestos de trabajo?

El tema esque el pasado martes presencié en una charla orientativa sobre las carreras universitarias que se estudian en la Universidad de Cádiz. Viendo el panorama, y teniendo en cuenta que el bachillerato que estoy cursando -humanidades, con latín y griego- me cierra muchas puertas, léase publicidad y relaciones públicas, una de las carreras que también me interesaban pero que pide conocimientos de economía, tenía decidido hacer algo relacionado con los idiomas, que se me dan mejor que otras cosas. Al terminar la charla, una periodista de Cadena Ser se me acercó para entrevistarme en directo y preguntarme si la charla me había servido de algo. Le expliqué mi situación y mis sueños de siempre, contándole que siempre había querido ser periodista, pero que finalmente no iba a estudiarlo por lo que antes he señalado. Rápidamente el presentador del programa, desde el estudio, interceptó mis palabras y me dijo que él también soñaba con ser periodista deportivo, y que eso era lo que menos hacía ahora, pero que sin embargo ama su profesión. Me dijo también que luchase por mis sueños, que tengo la obligación moral de estudiar lo que realmente me gusta, que intentara ser bueno y que no hiciese caso a la gente, que nunca se sabe cómo pueden cambiar las cosas de aquí a cuatro o cinco años.

Y así, sin saber ni con quién ni con qué programa hablé -que por la hora supongo que era Cadena Ser local-, he decidido que voy a estudiar periodismo. Es más, me he dado cuenta de que tengo que estudiar periodismo, porque es lo que realmente me apasiona. Mi objetivo es llegar a ser un buen periodista, y qué mejor manera que empezar aquí, hablando de la actualidad en general, haciendo lo que quiero hacer en el futuro, pero sin cobrar. Esto de los blogs es algo que he usado siempre, pero lo dejé hace tiempo y hace poco lo he vuelto a retomar. Sin más, espero que todo el que pase por aquí disfrute con lo que dejo escrito, que yo ya disfruto escribiéndolo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario